La habitación se tiñe de la pequeña luz de un velador en el escritorio del rincón. La madera y los tonos de amarillo van jugando en la difuminación del haz. Los caballos en la guarda de la pared corren en un prado pintado. Sólo hay un joven arrinconado escribiendo en su notebook. Sentado, frente a la ventana, mira hacia la noche y ve la Luna. Hermosa y llena, se sienta unos minutos sobre la terraza de un edificio alto, algo lejano pero no inalcanzable. Buenos Aires enciende otra noche. Como flashes pasan las pocas luces de autos sobre el pavimento. Los colectivos recorren monotonamente las avenidas, buscándole un sentido en las miles de historias que llegan a destino gracias a su viaje. Los negocios han bajado sus persianas para esperarnos renovados mañana. Es hora de alcanzar el sueño y despedir otro día. El muchacho sigue observando el espectáculo de ser noche en la ciudad. ¿Dormir? Se aturde en la mente, aunque lo intentó y no venció. Desde la silla, aunque incómodo y fatigado, recuerda su expresión al verse por primera vez. Siente en su espalda los mismos ojos que lo vieron esa noche de teatro ¿Qué se siente el marrón? ¿Y la miel? Que dulce pregunta a la que buscarle una respuesta. Dice, en voz baja, "
¿Qué se siente volver a verte?". La cabeza gacha y la mirada perdida. Son las 3 AM. Es tarde. Apoya sus codos sobre el escritorio de madera. Su pera sobre sus palmas, con las muñecas torcidas. La mirada se pierde en la Luna. Tantas veces leyó de amores que cruzan sus miradas en la luz de la Luna ¿Qué historia lee cuando vuelve sobre su propia historia? ¿Una en la que busca el amor o una en la que lo deja pasar por miedo? A pesar de la distancia, aún cuando no debería poder volver a verlo, internet dice haberlo encontrado. Espera una respuesta. Un joven a las 3 AM espera una respuesta de una posibilidad remota. Encontrar los ojos de alguien que te ha deslumbrado en la Luna tampoco es una ciencia cierta.
¿Qué se siente volver a verte? Espera poder responder. Desde el futuro o desde la Luna espera tener la respuesta algún día.
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